miércoles, 10 de octubre de 2012

EL KARMA, LA LLAVE PARA LA FELICIDAD (Budismo Tibetano)

Dictada el 15 de noviembre de 2003 en Santiago de Chile por el Lama Gendun Yarphal

Hoy quisiera explicarles sobre el karma, ya que es algo muy importante para nuestra vida diaria y
social. Si entendemos más sobre el karma, nuestra mente podrá disfrutar de un mayor estado de paz

La ley del karma es la ley de la causa y efecto.

En general, existen distintos tipos de leyes, las leyes de gobierno, leyes dictadas por las religiones, por tradiciones o diversas culturas. Sin embargo, la ley del karma no pertenece a ninguna de estas clases, el karma ni siquiera es una orden dada por un Buda. La ley del karma es la naturaleza misma de las causas y los efectos internos. Por esta razón, la ley de la causa y efecto existe desde antes de Buda Sidharta y es una ley que por su naturaleza, no podemos cambiar. Por ejemplo, la naturaleza del azúcar es su dulzor y nadie puede cambiar esta condición natural.

¿Cómo podemos saber que realmente existe este karma?

En nuestra ciudad nos podemos dar cuenta que existen distintos niveles sociales, existe un nivel social superior, personas que gozan de buena salud, hay algunos que tienen mucha inteligencia, conocimientos y hay otros carecen de estas cualidades. Dentro de una misma familia existen enormes diferencias entre los hijos de los mismos padres. Incluso los hermanos gemelos tienen diferentes características, en su inteligencia y personalidad. Uno puede ser tranquilo y el otro muy ruidoso, uno puede ser muy generoso y el otro no.

¿Pero por qué ocurre todo esto? Realmente es difícil encontrar una respuesta a todo esto, pero si entendemos sobre el karma, es fácil poderla encontrar. No hay nada, ninguna cosa que exista inherentemente, todo necesita de causas y condiciones para existir. Podemos decir que existe la fortuna, la buena suerte, pero siempre va a depender de causas y condiciones, en este caso del karma.

¿Qué tipos de karma existen o cuántos tipos de karmas hay?

Existen karmas positivos, karmas negativos, karmas mezclados y también podemos hablar del karma neutral. Las acciones positivas y negativas las podemos llamar también como karma positivo y karma negativo. El karma se puede acumular a través del cuerpo, a través del habla y a través de la conciencia o mente. Toda acción física es producida por la conciencia, por la mente. Toda acción que realicemos ya sea del cuerpo, del habla o de nuestra mente es producida primero por una intención. Por esta razón las acciones que son llevadas a cabo con una buena intención son un karma positivo y las acciones que son llevadas a cabo con una intención negativa son un karma negativo. El karma mezclado es, por ejemplo, cuando una madre le dice algo agresivo a su hijo. Podemos decir que ese karma es un karma mezclado, porque seguramente la intención más profunda de una madre es querer y amar a su hijo y una segunda intención más temporal es negativa o de agresión. Aunque esa acción es un tanto dura, en la profundidad de esa acción subyace el amor. Y el karma neutral es cuando no existe precisamente una intención positiva, pero tampoco una negativa del todo.

Cualquier tipo de acción que traiga como efecto la paz es un karma positivo y cualquiera que conlleve al dolor o sufrimiento, es el efecto de un karma negativo. Es muy importante aclarar esto, porque podemos pensar que si todas las emociones positivas y negativas que sentimos, son efectos de causas específicas, es posible hacer algo al respecto. Tenemos todas las posibilidades de cambiar la situación que vivimos. El karma pasado es la causa principal de toda la felicidad y también de todo el sufrimiento que podamos tener.

¿Cuál es la relación que existe entre la causa y el efecto?

El karma es una acción ¿Cómo puede afectar esa acción física un momento determinado del futuro o después de vivir nuestra vida? Nuestro cuerpo ya no está ahí, entonces ¿cómo puede traspasarse esa acción a un efecto en una próxima vida? Por ejemplo, cuando somos niños aprendemos a leer y escribir, cuando ya estamos grandes no necesitamos volver a aprender a leer y a escribir, es algo que ya podemos entender de manera espontánea. La mano o el dedo que tiene el joven o el niño, no es la misma mano que tiene el joven o el adulto. El cuerpo ha cambiado, no ha cambiado completamente, pero ha cambiado mucho. Entonces cómo puede esa acción de niño traducirse en un efecto cuando uno es adulto.

Porque cuando estudiamos algo, cuando somos niños lo hacemos con nuestra conciencia. La conciencia siempre está presente. Por lo tanto, la acción de este niño proviene desde la conciencia o de una intención, luego viene la acción propiamente tal. La energía de esta acción queda impresa en nuestra mente. Por esta razón cuando ya somos adultos podemos escribir o leer de manera espontánea como algo adquirido. Es como una semilla que se almacena, es decir, con cada acción nosotros ponemos una semilla en nuestra conciencia. Luego en el futuro, con condiciones especiales esta semilla crecerá. En el desierto de Chile, por ejemplo, hay muchas semillas enterradas y con un poco de lluvia surgen muchas flores. De no existir esa lluvia es imposible que las flores surjan, de la misma manera el karma es como una semilla. Tenemos distintos tipos de karmas en nuestra conciencia, por lo tanto, muchos tipos de semillas. Que las semillas crezcan o no crezcan va a depender de la aparición de condiciones determinadas.

Es muy importante eliminar o purificar el karma negativo.

En el budismo se cree que todos los seres sintientes poseen un tremendo potencial para purificar todo lo negativo que subyace en ellos. En el pasado hubo grandes maestros y muchos seres que purificaron su karma negativo y alcanzaron así la iluminación. Existen muchos métodos para poder purificar el karma negativo, se pueden hacer oraciones y postraciones, también existen mantras y meditaciones. Para nosotros lo más importante es ser capaces de desarrollar el amor y la compasión hacia todos los seres sintientes. La práctica del amor y la compasión es tremendamente poderosa para purificar el karma negativo, porque todas las acciones negativas o karmas negativos son llevados a cabo por una intención negativa, como consecuencia de no respetar a los seres sintientes.

Cuando matamos no respetamos su vida, cuando robamos no respetamos sus pertenencias, cuando tenemos una conducta sexual incorrecta no respetamos a nuestra pareja y no respetamos la pareja del otro. Si somos capaces de cultivar el amor y la compasión por los demás seres sintientes, desarrollaremos una intención que es completamente opuesta a la pérdida de respeto hacia el otro. Es como hablar de luz y oscuridad. La luz no puede permanecer junto a la oscuridad, la luz del amor y la compasión disipa espontáneamente la oscuridad. Esa es la condición principal para lograr eliminar el karma negativo.

Finalmente, cuando entendemos profundamente lo que es el karma podemos tomar decisiones en nuestra vida. Podemos tener muchos conocimientos sobre filosofía, pero si no llevamos a cabo la práctica, es difícil hacer cambios. Por eso, si tan sólo entendemos algo, por pequeño que sea, es importante llevarlo a la práctica y de eso hacer una experiencia de vida. La práctica es que en nuestra vida cotidiana tratemos de no llevar a cabo acciones negativas, tratar siempre de dar lo mejor de nosotros y acumular acciones positivas o virtudes.

A veces podemos pensar que lo que dice el budismo es demasiado para mí, si soy pescador por ejemplo cómo voy a vivir, cómo puedo respetar y practicar el karma si estoy matando a otros seres sintientes. El budismo es el camino medio. Primero es importante darnos cuenta de la diferencia entre acciones positivas y negativas. Para la mayoría de nosotros es imposible hacer de nuestras acciones algo perfecto o abstenernos completamente de acciones negativas. En el caso de un pescador que debe matar para vivir, sí puede practicar la enseñanza del karma. Si soy pescador, puedo tratar de que el sufrimiento que tengan estos peces sea el menor posible y de la misma manera, puedo llevar a cabo muchas acciones positivas. Si todos los días tratamos de hacer lo mejor posible, en algún momento seremos capaces de hacerlo perfecto. Si mato a un pez debo tratar de hacerlo no con una intención negativa. Alcanzar la liberación del sufrimiento o alcanzar el estado de un ser iluminado, de un Buda, la iluminación, se realiza a través de la práctica. Por lo tanto, es muy importante tratar de dar siempre lo mejor de cada uno, de esa manera disminuiremos nuestro sufrimiento. Si entendemos sobre el karma ayudaremos a que nuestra mente esté más en calma.

A veces cuando a alguien le ocurre algo malo podemos sentir que esto es algo que aparentemente le cae del cielo o que alguien le castiga, podemos sentir incluso que el sufrimiento que padezco es inherente. Pero cuando entendemos la ley del karma nos damos cuenta de que todo lo que sucede depende de causas y condiciones. Lo que sucede en este instante está dependiendo de acciones pasadas y lo que sigue hacia el futuro depende del presente. Un famoso maestro decía que no es necesario preguntar a alguien por nuestra vida en el futuro. Si quieres entender qué es lo que hiciste en el pasado debes observar el presente, sus condiciones, y si quieres saber lo que habrá en el futuro, observa tu mente. Si en tu interior existe una intención positiva es seguro que en el futuro habrá mucha felicidad y paz. Por lo tanto, la explicación del karma nos dice que lo que experimentaremos en el futuro, paz o sufrimiento, va a depender de nosotros mismos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario